jueves, 26 de julio de 2012

MOSAICO HIDRAULICO ABRILLANTADO A MANO


Desde mi experiencia como marmolista y abrillantador de suelo voy a intentar en este blog detallar el abrillantado de este material que desde que llegué a Valencia me tiene sorprendido con su amplia gama de colores y diferentes posibilidades de acabado.

En este artículo en concreto vamos a dar un tratamiento de limpieza previa, después trataremos la baldosa con lijas diamantadas de diferente grano, y por último aplicaremos una terminación en cera plástica y otra con aceite de linaza. No obstante, y por mi experiencia, cuando lo que queremos es hacerlo en una solería completa es mucho mejor una limpieza profunda y posterior cristalización de este material, o incluso un pulido o diamantado de ser necesario.

Como vemos en la primera fotografía tenemos una baldosa (sacada de un contenedor de restos de obra) sucia y al tacto áspera .Así que procedo a una limpieza con cepillo duro y un producto alcalino de limpieza, así como con un detergente neutro, y posteriormente aplicando (foto 2) lijas diamantadas desde el grano 60, pasando por el 120,220,400 y por último 800, consiguiendo el resultado que podemos apreciar en la fotografía 3, y comparándola con otra baldosa sucia en la fotografía 4.En este punto he conseguido cerrar bastante el poro y conseguir un tacto suave y un cierto brillo (fotografía 5).Es en este punto donde aplico dos acabados diferentes: por un lado cera plática como vemos en la fotografía 6, en este caso cera plástica pulimentable en pasta ( de ser una solería completa no aplicaremos este tipo de cera, sino un sellador y posteriormente cera plástica líquida)dejando secar unos 30 minutos y frotando con un trapo para hacer aparecer el brillo. Por otro lado aplico aceite de linaza rebajado al 50% con esencia de trementina en una primera capa, elimino el sobrante a los 30 minutos y dejo secar 24 horas, a las 24 horas aplico una segunda capa y vuelvo a eliminar el sobrante dejando secar otras 24 horas (fotografía 7).Los productos usados aparecen reflejados en las fotos 8 y 9 respectivamente.










El resultado de la aplicación de cera plástica es bastante satisfactorio en cuanto a brillo, aunque deja trazas visibles al trasluz, es mejor aplicar sellador y cera líquida para posteriormente pasar cepillos en seco, pero esto en una superficie a mano no da tan buen resultado como a máquina, y aún mejor es un cristalizado tras el diamantado, pero tampoco es viable en este trabajo a mano. El resultado por el contrario con aceite de linaza es un brillo pronunciado, pero a requerido de mucho tiempo para su secado, y sobre todo es una superficie algo pegajosa, que posiblemente atraiga toda la suciedad.

lunes, 9 de julio de 2012

LIJADO Y ABRILLANTADO DE MARMOL


Para que podáis comprobar cómo se lleva a cabo el lijado a mano de una piedra, hemos realizado este artículo en el que realizamos el trabajo con lijas de carburo de silicio tradicional y encerado con potea blanca. Hay multitud de formas de realizar este trabajo, desde el pulido con pulidora y segmentos , hasta diamantado con lijas de resina sintética.


Para este trabajo en concreto usaremos: Lijadora orbital, lija rígida de grano 60, lijas con base de velcro de grano 60, 120, 220, 400, 600 y barra de potea con trapo para aplicarlo con la lijadora.

El primer paso es lijar con  lija rígida de grano 60 para eliminar las rayas y arañazos que tenga la piedra, a partir de aquí iremos lijando sucesivamente con cada una de las lijas de velcro de menor  a mayor grano con lo que iremos afinando cada vez más el tacto y el aspecto visual de la superficie, asegurándonos que eliminamos entre un grano y otro los posibles arañazos que nos van dejando las lijas.

El último paso es aplicar la potea con el trapo. Colocamos el trapo en la lijadora ponemos en movimiento y frotamos la barra de potea para impregnar el trapo y frotamos sobre la piedra, veremos como el brillo va apareciendo a medida que frotamos, en caso de necesitar más potea volver a repetir la operación.



El resultado final no iguala a un pulido mecánico, pero es muy útil en pequeñas superficies como tapas de mesitas o tapas de ventana en la que no podemos aplicar un pulido mecánico.